Elige carne de calidad: Busca cortes frescos y bien maridados. La carne de buena calidad tiene una textura firme y un color rojo brillante. Si tiene un tono marrón o gris, podría estar pasada.
Para identificar carne en mal estado, es importante revisar varios factores. Primero, observa el color; la carne fresca debe tener un color rojo brillante o rosado, dependiendo del tipo. Si presenta tonos marrones o verdosos, es una señal de que ha comenzado a descomponerse. También verifica el olor: la carne en mal estado suele tener un olor desagradable, a podrido o agrio. Además, toca la carne: si está viscosa o pegajosa, es mejor descartarla. Por último, comprueba la fecha de caducidad y el almacenamiento adecuado, ya que el calor y la humedad pueden acelerar el proceso de descomposición